LAS MUJERES INVISIBLES PARA LA JUSTICIA PENAL DE FLORENCIO VARELA.

El título busca agrupar a las mujeres que la justicia no busca, a las mujeres que la justicia discrimina, a las mujeres que no les creen y a las mujeres que la justicia no protege.

Cronológicamente expondremos varios casos que dan cuenta de esa siniestra forma de administrar justicia de los que ocupan el cargo de fiscal y deberían actuar representando a la sociedad.
El primero de los casos es el de Paula Martínez, abusada sexualmente por un grupo de más de cinco hombres en el año 2016. En la cara le dijeron que la fiscal no le creía, no le recibían la ropa, prueba fundamental para el estudio de ADN y ella incansablemente se manifestó frente a las fiscalías y juzgados hasta que la justicia ordenó las detenciones.
Los acusados ya no estaban en la casa y tuvieron tiempo de profugarse y contratar abogados caros para silenciar a la mujer y lograr la impunidad. Conclusión, varios años prófugos, Paula se suicidó o la mataron sin ver que se haga justicia. La fecha del juicio la designaron después de la muerte y se condenó a varios, entre ellos un guardia comunal de Florencio Varela. Cuando se hizo viral el caso por la muerte de Paula, tuvo que salir de las sombras el último prófugo que por más de cuatro años estuvo escondido a unas cuadras de la fiscalía, la policía no lo buscaba, todos los acusados tenían protección, muestra de ellos es que todos tienen abogados particulares carísimos y vienen de familias pobres, muchos de ellos son cortadores de pasto. ¿A quiénes ocultan, quien participó del abuso y paga por el pacto de silencio? ¿La Trata en Varela mandó a ablandar a Paula para meterla en la prostitución? Hoy día existe un perfil de ADN de un hombre que nadie sabe quien es, y que la justicia sigue sin buscar.
El otro caso es el de las chicas de la “Masacre de Senzabello”. En el año 2017 salieron de bailar, los que las discriminan dicen que eran mulas y participaban de la compraventa de droga al menudeo y se quedaron con un vuelto y fueron castigadas. El castigo consistió en una balacera que mató a casi todas, dos se salvaron de milagro (una ambulancia se detuvo, pero no se las llevó ni atendió, quedaron heridas sobre el asfalto mientras todos las filmaban y pisaban la evidencia). Hoy con las secuelas de esa madrugada de terror viven con temor. Para la justicia son invisibles, hoy día la causa archivada, no hay responsables, no hay culpables y si la policía y la justicia no investigan, tampoco van a escuchar a los familiares que se animan a reclamar, andan como andaba Paula, queriendo aportar pruebas. En este caso la hermana de una de las víctimas hizo un trabajo para limpiar el audio de un video y se puede ver y escuchar a un hombre que le dice a una de las chicas que agonizaba en el piso “ojo con lo que decís”, hoy esas mujeres son invisibles para la justicia de Florencio Varela, es otro caso no resuelto.
¿Dónde está Roxana? Se puede leer pintado en las paredes de Varela. Es una pregunta que se hace la familia, pero que no quiere hacerse la justicia. Nadie la busca, ¿se la llevó La Trata?, es lo que algunos dicen, pero tampoco los quieren escuchar. Roxana, a comienzos del año 2018 salió un día de la casa y no volvió, o no la dejaron volver, otro de los casos que esperan justicia entre los escritorios de la UFI 4.
Victoria Mateluna, una niña en extrema vulnerabilidad, captada por un grupo de jóvenes que la drogaron y violaron en el año 2019. ¿Los mandaron a ablandarla para La Trata como a Paula?, ¿lo hicieron porque son delincuentes sexuales? Hay unos teléfonos secuestrados, la justicia no los inspeccionó, nunca vamos a conocer quienes estuvieron en el lugar, hay 5 perfiles de hombres que la justicia no busca, la causa fue archivada por la UFI 8. El resto de los hombres fueron condenados, ninguno habló, todos también tuvieron abogados particulares prestigiosos e importantes como sus honorarios, ¿quién les paga? ¿A quien ocultan? ¿Con quién sellaron el pacto de silencio? ¿Qué se oculta? ¿Trata de Personas? ¿Delincuentes sexuales poderosos o hijos de poderosos? La desidia de la justicia se encarga de mantener sin respuestas esas preguntas. Hoy Victoria denuncia que la hostigan, la justicia le pide pruebas, pero le niega una restricción, no sea cosa que llame algún poderoso para quejarse, mientras nadie cuida a Victoria, ¿qué esperan? ¿Que se convierta en otra mujer invisible? ¿O ya es invisible? Hoy día salen las restricciones en 48 horas de la denuncia, pero a Victoria que denunció, le piden testigos… así está la justicia.
El destino o los sorteos poco transparentes, hicieron que caiga en la misma fiscalía (UFI 4) la causa en la que se investiga la muerte de Paula Martínez a finales del año 2021, ¿suicidio? ¿muerte por encargo para que no hable en el juicio? Nadie lo sabe, quizás nadie lo sabrá, ¿hay que proteger al único que no se identificó con la muestra de ADN? Nadie sabe, nadie quiere saber y la justicia se encarga de eso, que, pese a que el país supo del caso de Paula, que el tiempo la convierta en una más de las mujeres invisibles para la justicia de Varela.
Estos casos que agrupamos para mostrar cómo atienden a las mujeres en la justicia penal de Florencio Varela, llegaron a los medios de comunicación, aunque para la justicia son invisibles. Así discriminan a las mujeres que no les gusta cómo se visten, por su pobreza, por sus gustos para festejar, por salir a bailar o simplemente por salir de casa y ser lindas y atractivas para la captación de La Trata o por los gustos ilegales de algunos poderosos.
Otras mujeres, muchísimas más, las que no llegan a los medios masivos de comunicación, siguen invisibles, van de ventanilla en ventanilla, hasta que se cansan y se van a sus casas o donde puedan, pero seguro sin justicia, sin que nadie las escuche.