CASO NAHUEL SANABRIA Y LAS CÁMARAS DE SEGURIDAD DE EMICAT: ¿INOPERANCIA O COMPLICIDAD CON ALGÚN PODEROSO?

Desde el Equipo de la Agencia de Noticias La Barriada venimos siguiendo minuciosamente los hechos que terminaron con la muerte de Nahuel Sanabria, pero creemos necesario recordar algunos detalles:
El 19 de diciembre de 2023 el joven Nahuel Sanabria aparece muerto dentro del galpón de la Distribuidora de Alimentos EMICAT, propiedad de dos hermanos de apellido Estarle, con muchísimos golpes en el cuerpo y el rostro.
Cualquier persona aunque no sea abogadx y mucho menos funcionarix judicial ante un hecho de tamaño gravedad como es que aparezca un joven fallecido en un local comercial con golpes, lo primero que intentaría es incautar las cámaras de seguridad del lugar, de los comercios aledaños y de los domos municipales.
En este caso la Doctora Mariana Dongiovani, Titular de la Fiscalía 2 no incautó de modo inmediato las cámaras de la Distribuidora EMICAT, ni la de los dos comercios linderos que también son distribuidoras de alimentos.
¿En serio una fiscal puede olvidarse de incautar las cámaras del lugar del hecho? ¿No sé dió cuenta que las empresas contiguas tenían cámaras para solicitarlas?
Cuesta creer que la Fiscal Mariana Dongiovanni no supiera que las filmaciones, en la mayoría de los casos se borran si no tienen un sistema de nube para guardarlas. Ante el accionar de la fiscal Dongiovani de no incautar las filmaciones del lugar del hecho, ni las de las empresas contiguas y mucho menos las del municipio, la propia familia de Nahuel las solicitó el 30 de diciembre a través del Centro de Asistencia a la Víctima.
El día 3 de enero del 2024, 16 días después del asesinato de Nahuel y por exigencia de la familia, Dongiovanni solicito las filmaciones de las cámaras municipales pero no las del lugar del hecho. ¿No es raro que nunca pida la filmación de EMICAT? ¿En serio la Fiscal Dongiovanni pretende que la sociedad varelense y las familias de las víctimas la respeten?
Otro dato para sumar a este mal desempeño es que nunca incauto los teléfonos de los dueños de EMICAT ni de sus empleados para determinar si habían solicitado la atención médica, porque nunca se hizo presente una ambulancia. Otra vez nos preguntamos¿No es llamativo que no lo hiciera en el momento pero tampoco en su resolución del día 3 de enero del 2024?
Finalmente, no aceptó que los testigos dejarán plasmado en su declaración las sospechosas actitudes del personal policial. ¿Por qué, Doctora Dongiovani, la empleada judicial de la UFI 2 se negó? ¿Por qué no permito que quede asentado en el expediente los dichos de la testigo fundamental sobre que ” fue incomunicada en la comisaría tercera y le sacaron su celular durante horas? ¿Por qué a pesar del pedido de la familia no cita a los testigos ofrecidos?
Una vez más como en la Masacre de Senzabello, como en el secuestro de Lautaro y Lucas, la fiscal Dongiovanni se olvida de pedir medidas vitales, no atiende familiares o pretende descalificar en privado y ponerse en un vergonzoso papel de víctima.
Las únicas víctimas son las personas asesinadas, desaparecidas y sus familias, es necesario que a la luz de tantos y tan recurrentes hechos que claramente niegan el acceso a la justicia de la población de Varela, la Fiscal Dongiovanni sea apartada de su función.


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