Desde la Agencia de Noticias La Barriada venimos contando la trama de negocios del ex preso y represor Francisco Chicho Basile que tiene como aliado y socio a Julio Pereyra.
Desde que llegó al gobierno Andrés Watson instaló la idea de que entre otras cosas terminaría con los negocios de Chicho Basile porque no toleraria esas tramas de corrupción que se llevan muchísimo dinero del presupuesto municipal pero «la única verdad es la realidad”.
En la vida real, Chcho Basile sigue manejando el millonario negocio de recolectar los residuos y hasta remodeló la Plaza Central con su Empresa Servicios Y Gestión.
La voracidad de los negocios de Chicho Basile lo llevó a desalojar parte del Club de Fútbol Infantil San Eduardo, que desde hace 40 años trabaja por los pibes de esa zona.
La Empresa Servicios y Gestión la misma que hace asfaltos para el municipio ahora, llamativamente, es propietaria de las tierras que hace 40 años ocupa el Club San Eduardo y su representante legal es el Concejal de Unión Por la Patria, Guillermo Poletti un ex socio político de Daniel Zisuela, el condenado Diego Giménez y el Lagarto Olmedo.
Hace tiempo que el Concejal Poletti es abogado de Chicho Basile y se ocupa de defender sus intereses sin demasiada preocupación por los siniestros antecedentes del personaje .
En los días previos a la navidad las máquinas de la Empresa Servicios y Gestión arrasaron con parte de la infraestructura del Club San Eduardo mostrando la impunidad que caracteriza a Chicho Basile y su abogado Guillermo Poletti.
Está claro en nuestra ciudad,quienes son Chicho Basile y Guillermo Poletti, pero es el gobierno municipal el que debería defender al Club San Eduardo frente a los atropellos de los empresarios de pasado y presente oscuro.
El Club San Eduardo recurrió al Secretario de Relaciones Institucionales del Municipio de Florencio Varela, Oscar Nuñez para solicitar que el municipio ayude al Club y la decenas de pibes que ahí participan. Se realizó la reunión entre representantes del club, que solicitan que les permitan contar con el espacio necesario para poder seguir participando de la liga como hace 40 años, funcionarios municipales y la Empresa Servicios y Gestión, por supuesto ningún funcionario defendió los intereses del Club y sus pibes .
Chicho Basile y su abogado Poletti se niegan a ceder unos metros de tierra para que el Club siga existiendo, los funcionarios municipales defienden los intereses económicos de Chicho Basile y la comunidad del Club de Fútbol Infantil San Eduardo luchará como un Club con 40 años de historia .
Los negocios de Chicho Basile y la complicidad del gobierno municipal muestran hasta donde llega una práctica política que no considera a nada ni a nadie; ni siquiera a quienes se lleva por delante con tal de lograr sus nefastos objetivos.
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