La ausencia de una política sostenida de creación de jardines de infantes por parte de los distintos gobiernos nacionales y provinciales hizo que en los años ‘90 surgieran diversas formas de atender a las infancias de 45 días a 5 años: Madres, cuidadores y jardines comunitarios fueron algunas de las formas de cuidado emergentes.
Lentamente en algunas provincias se fueron fortaleciendo estás experiencias comunitarias y en CABA y Provincia de Buenos Aires se impulsaron programas de primera infancia.
Esta política pública que pudo superar las diferencias partidarias (aunque cada gestión le dió su impronta) lleva casi dos décadas de financiamiento estatal en los gobiernos nacionales de Cristina Fernandez de Kirchner, Mauricio Macri, Alberto Fernández, y también se financiaron las experiencias comunitarias en primeras infancias en los gobiernos bonaerenses de Daniel Scioli, Maria Eugenia Vidal y Axel Kicillof.
Hoy está vigente la ley nacional de primera infancia que permitió, solo en CABA y Provincia de Buenos Aires, el sostenimiento de más de 600 Jardines Comunitarios y Centros de Primera Infancia.
Estos espacios son gratuitos para cientos de miles de pibes donde reciben atención y alimentos lo que permite que sus padres y madres puedan trabajar; y son financiados por un crédito del Banco de Integración y Desarrollo (BID) con el gobierno nacional que está vigente hasta el 2027.
Estos espacios donde cientos de miles de niños son atendidos de modo gratuito y que garantizan el cuidado, la socializacion y la educacion de niñxs de familias trabajadoras, son el contraste de los jardines privados donde la cuota oscila entre $40.000 y $100.000.
El gobierno nacional a través de la titular del Ministerio de Capital Humanos, Sandra Petovello, decidió quitar el financiamiento a los jardines comunitarios y Centros de Primera Infancia, gratuitos pero sostienen el financiamiento estatal a los jardines privados que son emprendimientos comerciales.
Hace dos meses que los fondos fueron cortados y el gobierno no atiende a las experiencias comunitarias; las clases comenzaron, pero a comienzos de abril cerrarán más de 600 Centros de Primera Infancia y jardines comunitarios por falta de fondos.
El gobierno seguirá financiado jardines privados y destruyendo los gratuitos donde miles de niños dejarán de participar de una etapa fundamental .
Está decisión es una muestra más de que la casta son las familias trabajadoras.
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