El Cordobazo: “Un punto de inflexión en la historia argentina”

Hoy se cumplen 51 años del Cordobazo, movilización popular encabezada por la clase obrera y estudiantil de la ciudad de Córdoba, que derivó en el fin del gobierno autoritario de la dictadura de Juan Carlos Onganía.

El 29 de mayo de 1969 “fue un punto de inflexión en la historia argentina y, particularmente, de Córdoba”, señaló en entrevista con FM La Barriada Tomás Di Toffino, hijo del referente sindical Tomás Carmen “Titi” Di Toffino, participante del Cordobazo y detenido y desaparecido por la dictadura.

“Hay un antes y después. No se puede pensar el movimiento obrero de Córdoba sin el Cordobazo”, apuntó.

Al respecto, destacó que este hecho fue “muy importante”, por un lado, porque fue organizado totalmente por los gremios, y por otro, por la unidad en la lucha y la acción que lo caracteriza y que se promovió “más allá de los sectores obreros”, concretamente hacia el movimiento estudiantil.

“Nuestros compañeros que pusieron todo lo que había que poner para enfrentar una dictadura que decía que se iba a quedar por veinte años más”, manifestó.

“Una de las enseñanzas del Cordobazo es que debemos unir a todos los sectores que son agredidos por las mismas políticas antipopulares, y que si se logra esa unidad en la lucha y la acción se puede enfrentar y hasta herir de muerte a una dictadura como la de Onganía”, expresó.

En este sentido, resaltó que cuando se tomó la ciudad de Córdoba, fue con el apoyo inclusive de los negocios del centro comercial, que les suministraban los elementos para las barricadas a los manifestantes.

Además, indicó que “no hay que olvidarse” de que la quema de autos en la concesionaria de Citroën  se debió a que la representación de la empresa la tenía el interventor de la provincia de Córdoba, quien respondía a Onganía.

“Fue todo muy organizado. Estuvo bajo el control y la organización de los sindicatos y del movimiento estudiantil”, aseguró, recalcando que “ese quiebre fue un freno a una política de actos represivos- como lo fue la Noche de los bastones largos en Buenos Aires – que fueron el preámbulo de lo que terminó siendo el Cordobazo”.

A su vez, puntualizó que este hecho fue posible “en función de que existía un modelo sindical distinto al de los 90”, el cual terminó siendo un “modelo sindical empresario en donde lo único que importa es el beneficio personal”, y reivindicó el hecho de “tener la esperanza y el optimismo de que si se trabaja colectivamente se puede avanzar y salir de las peores situaciones”.

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