Mirta Rojas se instaló a comienzos del año 2000 en el Barrio Caacupe de Florencio Varela dónde a los pocos años empezó a militar en la Organización Barrios de Pie. Cuando la organización se dividió ella quedó de referente del Movimiento Libres del Sur.
Desde los comienzos de su presencia en el barrio, sus vínculos con la policía bonaerense fueron notables, tanto con personal de civil como uniformado.
Las vecinas guardan muchísimas fotos de móviles policiales o de la Guardia Comunal en la puerta de su casa de modo habitual además de la presencia durante años de los funcionarios municipales Franco Risso e Isabelino Barraza, ambos dentro del pedido de elevación a juicio en la causa Zisuela 2.
¿Por qué hace más de una década es la persona más cuidada de la ciudad por la policía bonaerense? Ni el Intendente Municipal cuenta con una custodia de esas características en su casa.
En el año 2000 una vecina, que era parte de un merendero, fue víctima de sus golpes y amenazas de muerte, y está mujer terminó internada varios días en el Hospital Materno Infantil de nuestra ciudad, esas lesiones originaron una investigación penal.
Hace una semana, en el Juzgado Correccional N° 1 a cargo de la Doctora Orseniewsky se llevó a cabo el juicio, donde el aporte de los testigos de la víctima, los informes médicos y la labor de la Doctora Mariela López, titular de la UFI 11 determinó que Mirta Rojas fuera condenada a 1 año, 3 meses y prohibición de acercamiento a la víctima y su familia.
Durante estos años fueron muchas las familias que denunciaron los atropellos de la reciente condenada en muchos casos con el apoyo policial que nadie puede explicar.
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