“Hoy es el aniversario de la movilización que fue un hito en la historia de nuestro país, en cuanto visibilizó y puso en la agenda pública la violencia de género y los femicidios”, expresó, en entrevista con FM La Barriada, Victoria Freire, integrante del colectivo Mala Junta y coordinadora del Observatorio de Género y de Políticas Públicas.
“La agenda que construyó el movimiento feminista nos permitió ganar grandes conquistas, como la ley Micaela. Todo lo que transitamos en estos 5 años nos permitió avanzar, incluso en un contexto que fue muy difícil en términos económicos y sociales”, manifestó.
“El movimiento “Ni una menos” tuvo la capacidad de interpelar masivamente y de politizar conflictos y cuestiones que estaban siendo muy tapadas”, resaltó.
“Contamos con un movimiento feminista, popular, plural y diverso, que señala y denuncia estas cosas y que se movilizó cada vez que tuvimos que lamentar femicidios”, declaró.
Además, consideró que la concentración del 3 de junio de 2015 logró identificar que la violencia “no es un problema personal sino social”, por lo que interpela al Estado y demuestra la necesidad de políticas públicas y presupuesto.
“El Estado tiene la necesidad y la urgencia de reconocer que son las organizaciones junto con este movimiento los que construyen en el territorio, acompañando y buscando soluciones para quienes pasan situaciones de violencia”, indicó.
“Hoy el desafío es que se escuche a quienes están en el territorio para que las demandas y necesidades sean tomadas en cuenta por las políticas públicas”, opinó.
Al respecto, advirtió que “cinco años después cambiaron muchas cosas pero otras no”, señalando que “lamentablemente las cifras de femicidios y travesticidios siguen siendo alarmantes”, en tanto que la cantidad de denuncias que se registran “es preocupante”.
“Hay una violencia machista inserta de forma estructural en nuestra sociedad, que nos demanda acciones y pensamiento”, refirió.
“Una de las cuestiones que rápidamente pusimos en alarma cuando comenzó la cuarentena fue señalar que es en el ámbito domestico y familiar donde ocurren la mayor parte de las violencias. Por eso la reacción inmediata fue difundir herramientas para que aquellas personas que están confinadas con sus agresores tengan recursos para pedir ayuda”, apuntó.
“Estamos más prevenidas, pero hay muchísimo para hacer. Si se piensa que la violencia son sólo los golpes físicos, no se va a entender nunca por qué siguen habiendo femicidios en nuestro país como un fenómeno estructural y permanente”, cuestionó.
“Para explicar las causas de la violencia hay que atender a muchos factores vinculados a las condiciones de vida de las personas y la falta de acceso a derechos, para repararlos y reconocerlos”, planteó.
Para escuchar la entrevista completa, hacé click aquí.
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